Aprendiendo de la vida


3 de abril de 2009

Nadar hacia la felicidad

La vida nos pone en situaciones que ni imaginamos.
A veces pensamos que ya tenemos resuelta nuestra vida: llena de planes, proyectos, amores, y tenemos certeza que nuestro futuro ya está "trazado"y creemos que con eso seremos felices ... y BOOM!, de un momento a otro todo cambia... ¿Y ahora?, ¿Qué hago? ¿Cómo lo manejo? Perdemos el control, la seguridad y no sabemos cómo manejar estos cambios tan intensos ... Bueno, a sentarse un momento y a tratar de ver claro entre toda la bruma que nos agobia en un momento de crisis.
Hay razones por las que estas cosas suceden, motivos poderosos que harán que nos encontremos, nos reconozcamos y aceptemos: cosas aún más maravillosas están llegando a nuestras vidas y esa "felicidad" que creíamos ya estaba ahí era sólo un pequeño salvavidas que nosotros habíamos tomado para no seguir nadando, sólo para mantenernos a flote aún cuando sabíamos que era posible seguir avanzando; pues a veces hay que soltar ese salvavidas para poder nadar hacia tierra firme donde finalmente encontraremos lo que pensamos no existía o nos parecía inalcanzable y así no seguir flotando a la deriva.
Cuando finalmente decidamos soltar el salvavidas, estaremos listos para cerrar círculos, para perdonar, para pedir perdón, para seguir adelante y ser felices con el alma limpia y poder recibir con el corazón abierto a quien te ama incondicionalmente y a quien tú amas.
Hay que soltar a veces ese flotador que sólo nos hace dar vueltas y vueltas sin destino alguno, dejarlo ir sin miedo a ahogarse y nadar hacia el amor más puro y maravilloso.
Suelta el salvavidas, te aseguro que no te vas a ahogar. Todos nos merecemos ser felices de verdad.

No hay comentarios: